Muchas personas intentan dar cátedra sobre lo que es y no es el coaching. Es claramente una técnica que viene de los Estados Unidos, aunque se usara desde tiempos de Sócrates (ver la historia del coaching), pero la palabra en la actualidad está dando sus problemas.
Les sugiero dejar a un lado el ego y pensar con sentido común. ¿Qué es un coach? Cualquier persona de la calle que sepa tres palabras de inglés dirá... ¡eso es un entrenador! Si vamos a la R.A.E., el que entrena nos aparece como "preparar, adiestrar personas o animales, especialmente para la práctica de un deporte".
Dicho esto, no tiene sentido ir contra natura. Personalmente comenté el término con un catedrático de la R.A.E. y me comentó que la palabra coaching no tiene visos de añadirse, pues es un barbarismo que en nuestro idioma cuadra más la palabra "guía". Ya le comenté que a mí me gusta más acompañante, pero bueno, son tecnicismos lingüísticos.
Mientras tanto, impulsen tanto como quieran los millones tipos de coaching que están surgiendo, pero sepan que o entrenan a un deportista o a un perro, o simplemente el problema viene primero de la palabra. Lo más divertido es que en vez de formar desde el uso del lenguaje, se forma desde la imposición que quiere hacer cada uno con lo que considera coaching. Y además parece que cuantos más “socios” se acumulen, se pretende tener más razón.
Personalmente, recomendé en esta entrada unos consejos para explicar la palabra coaching. No se me enojen… que hacen faltan distintos pasos para que esto tome forma, y desde luego, por ahora vamos por mal rumbo en muchos países.
Muchas personas intentan dar cátedra sobre lo que es y no es el coaching.
Hola Pedro. Gracias por exponer esto de palabras y lenguaje. Yo tambien creo que podemos agilizar nuestra creatividad y comenzar a usar palabras como: Acompañante de felicidad -como creo q tu usas a veces- o… -en mi caso- Asesora de eliminar dolores en 2 o 3 sesiones…. Porque hasta ya surgen los “coach-osteopatas”…inaudito….!
Un besazo desde Barcelona
Lorena Araujo
Lástima que el anuncio de TV de ING Direct ) haya tirado al cesto de las palabras inútiles la de “mayéutica”, porque me gustaría ponerla en mi tarjeta de visita y que a la gente, al menos, le sonara de algo que tendría que saber (al menos los que estudiamos en su día el BUP). Vamos, que tendrían una reminiscencia de conocimiento de algo que en su día supieron. Todo muy socrático. Un abrazo, Pedro.
Pedro, gracias por tu artículo! A mí, personalmente, no me gusta el término (además de que es un barbarismo, como bien dices; suena mal!). Prefiero “consultor”, “ayudante” o las que tú propones. En cualquier caso no he pensado mucho en una palabra para usarla como sinónimo porque parece ser que ser “coach” es algo que viene por haber cursado algún tipo de estudios homologados (y caros). Así que, aunque quiera, no puedo denominarme “coach”, ni, supongo, ninguno de sus sinónimos o traducciones. ¿Tú que opinas?
Un saludo
Realmente creo que el coaching no es más que una técnica, al igual que la formación o la consultoría. En el punto en el que estamos, que cada cual se llame como guste, pero a mí cada vez me gusta menos la palabrita coach.
De acuerdo Pedro, hoy hasta los brujos hacen “Coaching”, lo mal utilizan para casi todo, asesorar, mentoring, consultoría, terapia y no paramos.
Como es la palabra de moda, entonces todos la ocupan.
Gracias Pedro por este blog