¿El chantaje? Es el mejor ejemplo en los tipos de poder en la negociación... ¡es un poder enorme! Intenta atacar a nuestro miedo a ser feliz basándose en la extorsión del más fuerte. Habitualmente viene precedido de una amenaza, que, en muchos casos, se trata de una amenaza velada, y que no es más que un chantaje realizado con una musiquilla diplomática. Ahora los hacen con cadenas de WhatsApp y algunos están llegando a tener un final de lo más triste ("La Fiscalía investiga el suicidio de una empleada de Iveco tras la difusión de un vídeo sexual", que llegó a ser el guion de una conocida serie de Netflix).
Cómo es el chantaje emocional
El chantaje emocional es una forma de manipulación que se basa en el control y el aprovechamiento de los sentimientos de la otra persona. Se trata de hacer que la otra persona se sienta culpable, insegura o incapaz de afrontar las consecuencias de no acceder a lo que se le está pidiendo. ¿Quién no ha sido víctima del chantaje emocional? Es una forma de manipulación muy común en las relaciones, tanto de pareja como familiares o amistosas (incluso ahora en las relaciones por Internet). Aunque muchas veces no nos damos cuenta, el chantaje emocional es una forma muy dañina de relacionarnos con los demás.
¿Verdad que se escuchan muchas veces? ¿Quizás en forma de amenaza velada? ¿Quizás con frases de chantaje emocional? “cariño, tienes que hacer esto o te vas a enterar”, “termina todo el trabajo si no te quieres exponer a medidas drásticas de la dirección”, ”más te vale que XXX para que no pienses que eres un YYY”… La verdad es que se utilizan mucho en nuestra infancia para educarnos en unas normas, “si no te comes eso, viene el coco y te secuestra”, “si no te portas bien, los Reyes Magos no te van a traer nada”, y parece que muchas personas siguen pensando que son la mejor solución para obtener resultados.
Ceder al chantaje
Lo mejor es no ceder al chantaje emocional, ni al chantaje físico, ni a una amenaza velada (interesante conocer la diferencia entre amenaza y advertencia). Personalmente tiempo que perdí los miedos (menos los miedos físicos, ya que me tiraría por un barranco de no tenerlos). Cuando alguien me viene con sus amenazas o sus chantajes emocionales mi sonrisa es la respuesta. En mi opinión, las personas que amenazan, se rodean frecuentemente de incompetentes (cacatúas sin sentido), porque son los que los aceptan sin problemas (hasta que un día explotan y es peor).
Cuanto más desapego total tengamos y más nos libremos del miedo a perder algo, más complicado será que nos apliquen el poder del chantaje. No lo olvides, a lo único que hay que agarrarse con mucha fuerza es a la vida. El resto, puede ir y venir.
Y cuando sufras un chantaje... intenta no poner mucha energía en eso... ¡mejor bailar como Shakira!
Reflexiones sobre el chantaje
El chantaje emocional es una herramienta manipuladora utilizada por ciertas personas para obtener lo que desean a expensas de otros. Se caracteriza por la explotación de las emociones de la víctima, generando sentimientos de culpa, miedo y angustia, ¿quién no ha vivido algo así alguna vez?. Es importante comprender el perfil del chantajista emocional, aquel individuo que busca controlar a los demás a través de la manipulación. Imágenes de chantaje con frases impactantes pueden ilustrar las tácticas utilizadas por estos chantajistas, y me gusta siempre recordar mi post con el ejemplo de una persona incompetente.
Frases como "No sabes cuánto te necesito" o "Si me dejaras, estaría destrozado/a" son ejemplos claros de chantaje emocional. Estas palabras, aparentemente inocentes, ocultan la intención de controlar y someter a la otra persona. Es crucial reconocer los signos de chantaje emocional en una ex pareja. Si identificas comportamientos como el uso constante de lástima, amenazas veladas o la manipulación de tus sentimientos para obtener lo que quieren, es probable que estés frente a un chantajista emocional. Romper con este ciclo tóxico es fundamental para tu bienestar emocional.
Hola Pedro
Me gusta mucho tu enfoque y estoy de acuerdo. El problema que me surge es cuando la amenaza, la consecuencia de no ceder al chantaje, sea cual sea viene de tu ex pareja y afecta al bienestar de tus hijos. No es la propia vida pero casi, casi.
Blanca, gracias por tu comentario, y te dejo esta reflexión… ¿seguro que no hay otra opción? ¿reflexionaste todas las posibles soluciones?
a mi me dan ganas de llorar.
¿Y qué te lo impide?
Por mi culpa….siempre iba a ocurrir la mayor desgracia del mundo. Eso me decían. Lo peor es que me lo creía. La edad no me dejó sonreir….eran muy pocos años los que tenía.
Miguel… ¡qué buen ejemplo! Gracias por compartirlo.
Excelente visión del chantaje, el darnos cuenta que desde pequeños crecemos chantajeados y lo vemos como algo natural, por suerte desde la educación emocional se están trabajando las competencias socio-emocionales, de esta forma seremos personas más libres, responsables y conscientes.
Saludos,
Silvia
Silvia… ¡totalmente de acuerdo! ¡muchas gracias por el comentario!
¡Sensacional, colega! Tengo la misma mirada sobre este tema. Además, desde la formación de Coach, con el conocimiento y experiencias que nuestra amada profesión nos permite atravesar, me parece tan ingenua la postura del que cree que esto funciona que no puedo menos que como vos, SONREIR! Con todo respeto, por supuesto. Muy buen post!
Rita, ¡muchas gracias por tu comentario en el blog!, además de en Linkedin… ¡y no dejes de compartirlo! 😀
Estimado Pedro:
Te felicito por tus comentarios y proactivismo en hacernos recordar que la vida es la esencia de nuestra existencia y solo debemos estar ocupados en el largo transito de la vida, hacerlo con alegria aunque el trayecto sea sinuoso, duro y algunas veces demoledor, tu experiencia de vida te lo hizo saber, sin embargo, existe un Dios todopoderoso que cada dia nos regala un amanecer y las ganas de luchar por que cada dia seamos mejores personas
Totalmente de acuerdo, NO a los chantajes, amenazas, amedramientos, condicionamientos, prepotencias e incluso agresiones, somo seres humanos civilizados y con valores
Un abrazo
Jorge
Jorge, ¡muchas gracias por tu comentario!, y totalmente de acuerdo en decir NO a todo eso.
Un abrazo.