¿Cuántas sesiones de coaching necesito? ¿Cuánto dura una sesión de coaching? ¿Es normal que me ofrezcan un kit de 20 sesiones de coaching para empezar? Hoy me preguntó una compañera cuál es el número recomendado de sesiones y por qué había indicado que recomendaba cuatro o cinco, al haber coaches… ¡que ofrecen en Internet paquetes de 24 sesiones! La verdad, me parece una locura lo que están haciendo con la disciplina del coaching, a la que le han dado unos matices de modernidad, pero la ocultan como una terapia del montón. Mucho master in coaching, experto en PNL, mastercoach, maestria en coaching o que le guste... ¡al final hay mucho caradura!
En 24 sesiones da tiempo a que me cuenten su vida, a que hayamos hablado de la historia de los griegos, los romanos, los vikingos, los árabes, ¡y la de todo el mundo! En fin, demasiado tiempo. Cuando existe un problema a tratar en coaching, y como ya he comentado otras veces se dan unos pasos bien claros:
- Realizar la alianza con el cliente, que incluso se puede hacer por escrito, y en donde se indican las normas que tienen las sesiones de coaching, y los compromisos necesarios para que funcionen. Esto no debe durar más de 5 ó 15 minutos, y se sugiere complementar con un contrato firmado.
- Después comienza una sesión de coaching exploratoria, en donde se identifique el problema y un objetivo claro y medible. Si no es medible, no hay mucho que hacer, porque si viene alguien afirmando… “quiero que mi vida vaya a mejor”, ¿cuándo sabremos qué va mejor?
- Seamos coherentes necesitar más de una sesión para explorar el problema, es ignorar que existen herramientas como el Mapa de la Vida que ayudan a enfocar claramente dónde está el tema a tratar. Si son varios, pues entonces pueden existir varios procesos de coaching, pero como siempre menciono del famoso Jack el Destripador… ¡vayamos por partes!
- Realizada la exploración inicial, tocan sesiones donde se “enfrente” al cliente con el problema, donde “toque” los obstáculos, donde “vea” las creencias que le están limitando, donde sea capaz de “escuchar” nuevas soluciones al tema que le preocupa, etc. Aquí es donde siempre recuerdo que el coaching, mal realizado, puede ser muy lento, y por ello siempre me gusta aplicar técnicas de mentoring y liderazgo para conseguir más rapidez (siempre que el cliente quiera, claro).
- Cuando el cliente tiene ya sus primeras tareas a realizar, tiene que ponerse a la acción en el mundo real, y eso le puede llevar semanas. Por ello después de dos o tres sesiones semanales puede ocurrir que las siguientes sean cada dos o tres semanas, porque de otra forma es difícil comprobar si el cliente está cumpliendo los compromisos que marcó.
- Luego complementa alguna sesión de cierre y validación de los objetivos, y en donde se puede crear un nuevo desenlace a resolver o incluso la necesidad de derivar a otro especialista. ¿Quién ha dicho que el coaching resuelva todos los problemas? Claro, al bolsillo del coach le va muy bien escuchar y escuchar, pero hay cosas que hay que derivar a un terapeuta en otro formato, para resolver ciertos obstáculos del pasado.
He visto realizar, y he realizado, excelente coaching express en cinco minutos. Si bien con una simple sesión no es suficiente porque no se realiza ningún seguimiento o cierre, por lo que una única sesión no puede considerarse como coaching (no es más que una exploración inicial). En mi experiencia, encuentro que entre 3 y 10 sesiones es el número habitual para resolver un tema, y que es normal que puedan surgir otros temas que se pueden tratar de forma consecutiva o después de un tiempo.
¿Pero que alguien le cuente que requiere de 24 sesiones en un proceso de varios meses? Desde estas líneas le afirmo que lo que le ofrece es terapia enmascarada, porque sobra tiempo lo mires por donde lo mires. Aunque como ya he comentado otras veces es algo normal, pues hay personas que pasan de querer ayudarte a simplemente preguntarle cuánto le puedes pagar.
Para que nadie piense que ando limitándome si alguien requiere de 24 sesiones conmigo (por decir un número alto), prefiero que me inviten a comer 24 veces a donde más les convenga (cerca de mi casa, claro), pero ya les digo que no necesitarán coaching, sino simplemente contarle su vida a alguien. Estaré encantado de escucharles mientras almorzamos.
El coaching es una disciplina más… no te dejes engañar. Se lo comparte una persona que ha escrito mucho el tema…
Seguro te gusta este video donde explico qué es el coaching...
De acuerdo, no se puede generar lo que se conoce como “dependencia del Coach” en el Coachee. Buen Artículo!
Entiendo que entre 8/10 sesiones podrían ser más que suficientes. No me atrevería tampoco a marcar un número mínimo, ni un número máximo. entiendo que más de diez estamos hablando de un enganche personal o algo peor, un “saca-dineros” sin más palabras.
En todo caso, cada asunto y cada persona tiene su número de sesiones y su proceso. 24 sesiones me parece una absoluta barbaridad.
Establecer un número determinado de sesiones a priori no es muy profesional…El número de sesiones dependerá de la competencia del coach, los objetivos y competencia del coachee, así como del compromiso entre ambos y de las circunstancias (entre otros aspectos).Cada persona es diferente y lleva su propio ritmo…y el ritmo de cada uno será perfecto. Lo que es inadecuado es crear dependencias innecesarias. Me parece una pregunta muy acertada por parte de tu compañera.
Estefanía, totalmente de acuerdo. Muchas gracias por el comentario.
Tan sencillo como.. “tantas sesiones por tanto dinero” Pedro. Esto es lo que hacen. Te dicen tendrás 24 sesiones 1 vez a la semana durante 6 meses, o 48 sesiones todo el año en las mismas condiciones, es esto lo que hacen. No enmascaran, yo no lo llamo así, sólo engañan con el ” 1 vez por semana”, y así cobran más. EL coaching como yo personalmente lo uso es cada 15 días, a veces si es empresarial cada 20, con ejercicios de seguimiento entre semanas. Lo otro que se vende y he de decir que sólo lo he visto en redes sociales, es: si doy menos sesiones cobro menos, esta es la idea Pedro.
Un abrazo enorme.
Carolina, sigo pensando que los kits de tantas sesiones responden a un aspecto comercial del coach para lucrarse, pero no a una necesidad del cliente.
Coincido plenamente en tus
observaciones Pedro. El Coaching no es un proceso terapéutico y
mucho menos se desprende del psicoanálisis. Es decir, lo que
reflejas es determinante en todo sentido, particularmente desde lo
ético. Desde mi posición, claramente defino el ámbito de la
consulta partiendo específicamente de las necesidades de la persona.
Vale decir que no solo practico sesiones de Coaching, también de
Counselling y Psicoterapia; con lo cual para mi resulta determinante
el tener bien claro en qué ámbito estamos desarrollando nuestro
trabajo. Un abrazo.!
Daniel, muchas gracias por compartir tu comentario… ¡totalmente de acuerdo!