Cuando algo me gusta, lo digo, y cuando no me gusta también. No se mentir, las mentiras no me gustan, ¿qué se puede hacer si no me gustan las mentiras? La verdad es una de las cosas más importantes en la vida. Sin ella, las relaciones se vuelven tóxicas, las amistades se rompen y la confianza se pierde. A veces es difícil saber qué hacer si no te gustan las mentiras, pero aquí están algunos consejos que te ayudarán a lidiar con ellas.
No me gusta la mentira, ni tampoco me gustan las falsedades. Prefiero siempre la sinceridad y la honestidad en todas mis relaciones. No me gustan las personas que mienten y tratan de engañar, ya que considero que la verdad es fundamental para establecer vínculos sólidos y genuinos. No me gustan las imágenes que promueven la mentira, ya que creo firmemente en la importancia de transmitir información veraz y auténtica. En mi opinión, la falsedad solo genera conflictos y desconfianza, y no es algo que desee tener en mi vida.
No me gustan las mentiras, es la realidad. Es importante conocer la diferencia entre hipocresía y doble moral. He tardado muchos años, pero me temo que ya encontré el problema que tengo en algunas relaciones, ya sean profesionales o personales: no sé mentir y no me gustan las mentiras. Comúnmente dirían que me falta tacto o que digo las cosas muy directamente. Así que siguiendo los consejos populares, para saber decir las cosas mejor, aprendí habilidades de coaching y PNL. Tras unos años he comprobado que el problema no es la falta de política.
Las mentiras no me gustan
Sigo creyendo que en un mundo de mentiras la verdad es tu única arma. La dificultad que me absorbe es que no tengo ni idea de cómo mentir, y cuando me junto con alguien que no soporta que le digan verdades a la cara, pues comienza la disputa. Una disputa que pasa por varias fases, desde la falsa sonrisa inicial, hasta el desenlace con bronca, pasando por los comentarios negativos a mis espaldas.
Intento siempre aportar valor en mis comentarios con pensamiento crítico, desde un punto de vista coherente y racional, aceptando nuevas posibilidades. Pero nunca me ofrezco a complacer normas regladas con el único sentido de que se llevan ejerciendo mucho tiempo. No aprecio el pensamiento reduccionista o cualquier norma absolutista sin sentido… me temo que me saltan los molestos enemigos. Es fácil ver cómo aparecen algunos tipos de poder en la negociación.
Creo que no llegaré a nada en esta vida, porque hoy en día, compruebo que una mentira repetida mil veces se convierte en verdad sin avergonzarse lo más mínimo. Los ejemplos más claros los comprobamos en los políticos, que da igual lo mal que hagan las cosas, siempre se defienden alegando que otros lo hacen peor. También se ve en la televisión, donde hay mucho famoso que dice un montón de incoherencias sobre su vida personal, y con ello consigue ganar más audiencia. ¿Nos estamos volviendo locos?
No me gustan las mentiras
Además desde hace varios años tengo un problema adicional, y ¡es estoy formado en la disciplina del coaching! La gente tiene asociado en su mente que una persona que sabe de coaching siempre dialoga y no busca enfrentamientos. Es cierto y lo cumplo a rajatabla… ¡pero cuando estoy trabajando como coach!, pero no en mis ratos libres. No se pretende que un jardinero de profesión vaya también paseando por la calle podando los árboles que se encuentre (vamos, que creo que no saldrían de casa).
Al saber de coaching, mucha gente opina que tengo que olvidarme de que soy ingeniero, consultor, profesor, diseñador, escritor, conferencista… y cuando vea algo que está mal, simplemente debo sonreír y afirmar que el mundo el maravilloso y que somos lo que proyectamos. Además, como me presento como experto en felicidad, a todo el mundo le tengo que decir que soy jodidamente feliz. Todo el mundo acepta que un médico se puede poner enfermo, pero parece que nadie entiende que exista un átomo de infelicidad y descontento en mi interior.
Me temo que estamos poco a poco consiguiendo un mundo poco habitable, porque hay personas que no cumplen con las normas. No podemos decir que hemos evolucionado tecnológicamente y seguir cometiendo delitos y guerras por medio Planeta. Tenemos que trabajar entre todos, y sobre todo, empezando a utilizar la verdad. Afortunadamente vivimos en un mundo con mucha libertad, y a quien no le guste que le diga verdades, pude ir por un camino distinto. No tengo intención de sufrir el trastorno de mentir sin sentido. Es de los mejores ejercicios inteligencia emocional que practico.
No sé mentir
De veras, no me gustan las mentiras. Sé muy bien cómo decirle que me gusta a alguien. Cuando algo me gusta, lo digo, y cuando no me gusta también. Las dos cosas son igual de poderosas, y quien me quiera acompañar, que se atreva a decir verdades (por mucho que duelan). Quien no se atreva, que no se preocupe, pero que sepa que está siendo parte de modelo mediocre.
Las verdades hacen daño pero ayudan a la gente a tu alrededor más que las mentiras. Vivir en un mundo de mentiras no ayuda a nadie. :)-
Muy buen artículo Pedro. Siento que no he sido la única que va por la vida diciendo verdades que la gente no quiere escuchar, porque eso es lo correcto, porque si mentimos en realidad estamos viviendo una falacia, la cual tendremos que mantener con una y otra y muchas más mentiras. No existe la mentira blanca ni roja ni negra ni de ningún tipo, solo existe la MENTIRA y NO ES NECESARIA.
Si todos aprendieran a decir la verdad y mejor aún, en forma directa y sin rodeos ni adornos, este mundo sería mejor. Se evitaría los malos entendidos, no habría tanto odio y ¿por qué no pensar que hasta no habría guerras?
Mucho idealismo, si, estoy de acuerdo, pero me encanta este mundo de ideales y valores. A pesar de todo. Este es el espacio en el que soy más feliz.
Giovanna, muchas grcias por el comentario, con el que me siento totalmente identificado. Y me temo que también he comprobado que La mentira es la mejor arma que usan algunos para triunfar… https://www.pedroamador.com/la-mentira
Estoy completamente de acuerdo, la verdad es y sera el fin primero y ultimo ante todo.
Sin embargo, uno puede desarrollar la capacidad de decir lo mismo, de una forma generosa y cuidadosa cuando la ocasion lo amerite, y con esto quiero decir, usar palabras amigables, para que el otro se abra, escuche, entienda y le llegue mi mensaje en vez de enfocarse en defenderse.
Ahora si tengo que remecer a alguien, no dudare en decir lo que tengo que decir, sin siquiera endulzarlo ni ser amigable.
Saludos a todos
Ligia
Ligia, muchas gracias por el comentario… ¡entiendo tu punto de vista y lo me gusta mucho!
🙂
Me rio porque tengo el mismo “problema” (no es ningún problema!!!)
Aunque sí se mentir, hace mucho decidí que no me gusta hacerlo y por tanto no lo hago!!!
Ana, muchas gracias por tu comentario… ¡es un gusto compartir! 😀
No puedo hacer otra cosa que recomendarte un libro: “El conocimiento inútil” de Jean François Revel. Lo abre con la frase “La primera de las grandes fuerzas que mueven el mundo es la mentira”.
Jose, muchas gracias por el comentario y el aporte.
Más o menos con bastante frecuencia me encuentro a personas que me dicen: “es que yo soy muy franco y digo las cosas por su nombre. Y así, tengo problemas. Pero soy franco y no cambiaré” Cuando lo oigo pienso, esta persona tiene un problema de inteligencia emocional y quizás de autoestima. Puedes ser el mejor en conocimientos pero si no los sabes comunicar y que las personas de tu entorno las procesen y adopten no servirán de mucho. Por ejemplo, un directivo no es sólo tener conocimientos sino liderar, comunicar y crear un proyecto común. En Marketing una parte muy importante y básica de las 4P és la comunicación. No sólo producto, precio y distibución. ¿Cual es tu objetivo cuando comunicas? Informar y que la situación cambie y mejore en el futuro. ¿Crees que lo conseguirás simepre con una comunicación directa? Algunas o muchas veces si realizas una comunicación directa lo único que conseguiráspo la otra parte es provocar una posición defensiva que puede llegar a la confrontación si conseguir ninguna mejora. ¿No es mejor comunicarlo no tan frontalmente para conseguir un efecto mayor?
Carles, tienes mucha razón y gracias por la reflexión. Como dices, hay que buscar la mejor forma de decir las cosas, pidiendo permiso, y sabiendo buscar el momento adecuado. Pero no callerse demasiado…
Bueno ¡¡¡ yo no pretendo que seas coach todo el día ni que seas FELIZ todo el día , es agotador no⭐ tiene que haber un equilibrio, de lo malo se sacan conclusiones, lecciones, cabreos productivos y por supuesto improductivos, por lo demás ….. no puedes pretender que las perspectivas y las expectativas de los demás coincidan contigo cuando aplicas el sentido común mezclado con una realidad que tú ves y que incomoda a quién no sabe que la vive (en el mejor de los casos) así que PASA DE TODO ESTO y a por el magnun ¡¡¡¡¡ 1 beso
Marta… me tomaré un Magnum hoy a tu salud 😀
Muchas gracias por el apoyo.
me pasa exactamente lo mismo.. por que no simplemente miento un poco. soy amable y agradable… le digo a la gente lo que tiene ganas de oir
Muchas gracias por el comentario… pero ya es el momento de empezar a afrontar las verdades… aunque cueste un poco 😀
personas como ud. son las que necesitamos para vivir ,una vida diferente.me encanta que ud. si practique por lo menos uno de los mandamientos de la ley de dios .que dios lo bendiga.
Felipa, muchas gracias por el comentario. Dios le bendiga también.
El fin último de la mentira siempre es la manipulación, el juego de poder.
Para no mentir y a la vez no entrar en esos juegos que comentas, es necesario tener educación emocional, donde la verdad radical (el amor a la verdad) es una de sus tres “patas” básicas. Eso implica ser conscientes de que, en contra de la mala literatura de autoayuda y de una creencia errónea muy extendida, provocamos emociones en los demás, y los demás las provocan en nosotros. No podría ser de otra manera.
Si el resultado habitual es ese saldo de irritación y mal rollo, probablemente sea el resultado de un juego de “Defecto”, y habría que preguntarse por qué repetimos esos patrones una y otra vez. La misma información, transmitida de diferentes maneras, obtienen diferentes resultados en la misma persona.
Excelente artículo
Agustín, muchas gracias por tus palabras que llevan a una profunda reflexión. Excelentes ideas.
No se mentir, pero tampoco quiero aprender, no me creo rara o distinta
por ello, antes si, he perdido algunos amigos que creía tener, o tenido
problemas en relaciones familiares, me siento orgullosa de ser sincera,
es verdad que parece no estar de moda, pero tampoco lo está tener
valores y me agrada los que tengo y no quiero perderlos. Creo que la
mentira mata cualquier tipo de relación, amistad, familia, pareja, y
cuando alguien miente acabas por no poder creer nada de lo que dice, me
gusta decir lo que pienso y que me lo digan aunque a veces duela, gran
artículo Pedro, gracias.
Campanilla, totalmente de acuerdo. No mentir puede acabar con algunas relaciones… pero a la larga…. ¡mantiene las auténticas! Muchas gracias por el comentario.
La mentira creo proviene del “miedo al rechazo”. Una vez que aprendemos a amarnos a nosotros mismos, el miedo al rechazo deja de tener poder sobre nosotros, y la mentira cae por su propio peso. Donde hay AMOR, solo prevalece la VERDAD, pues la VERDAD nace del ESPIRITU, y la MENTIRA del EGO, el oponente del espiritu. Asi es como lo veo Pedrito, Un abrazo 🙂
Cecilia… ¡muchas gracias por tu comentario! ¡Gran aportación! Totalmente de acuerdo contigo. Un abrazo.
Interesante y polémico! Gracias por la provocación irreverente de tus ideas!
Muchas gracias por el comentario. La provocación es sólo para que se entiendan mejor las ideas 😀
GRACIAS POR AYUDARME A REAFIRMAR QUE NO DEBO MENTIR, QUE MI ESENCIA ES LA VERDAD Y QUE ASI SEGUIRE LO QUE RESTA EN MI VIDA, UN ABRAZO
Anama… ¡muchas gracias por tu comentario! ¡La mentira nunca es buena! 😀
muchas gracias por la información, desconstruir paradigmas, enfrentarnos a nuestro propio yo, desconstruir patrones culturales, el coach nos mueve a cambios profundos personales y profesionales
Maribel, muchas gracias por compartir tus impresiones. Te mando una gran sonrisa 😀
por esto afirmo que el coahing es TERAPIA , Y PUEDE SER MUY Y MUY EFICAZ. Ma. ELENA
María Elena, desde mi punto de vista el coaching es parecido a la terapia pero no es exactamente lo mismo. Normalmente la terapia se enfoca mucho en el pasado para solventar bloqueos, y el coaching se orienta más a las cosas a conseguir en el futuro.