Suena bien cuando dicen que liderar es dirigir o estar a la cabeza de un grupo, de un partido político, de una competición, etc. ¿Pero es realmente así? Me encantan los cambios… tienen que servir para filtrar todas las creencias limitantes, hacernos evolucionar y conseguir que seamos mejores personas. En mi vida, puedo presumir de haber realizado cambios de toda índole, siempre con la visión de dirigirme hacia mis sueños.
A muchas personas les falta el valor para empezar a cambiar… les falta algo que les motive. Ahora, cuando veo el movimiento de Puerta del Sol de Madrid, compruebo que hemos encontrado el valor para que las cosas cambien (¡ya era hora!). El motivo está claro: el país se está arruinado, la gente está en paro, los jóvenes sin posibilidad de adquirir vivienda, y lo que es peor… vemos que esto tiene para largo.
Ahora bien, una vez que tenemos el valor para empezar a cambiar… ¡hay que ponerse hitos intermedios e ir cambiando las cosas poco a poco! Como diría Jack el Destripador… ¡vayamos por partes! Se puede hacer todo en paralelo, e lanzarse a por todo, pero eso sólo dificulta las cosas, y puede conseguir que al final no se consiga nada. Como muchos sabemos… el que mucho abarca, poco aprieta.
Ha sido mi reflexión al comprobar la larga lista de propuestas de Democracia Real. Un listado maravilloso de cosas a resolver, de las que comparto muchas. Pero el problema es que no se puede pasar de aguantar todo, a de repente, querer cambiarlo todo. Y lo que es peor… ¡sin que haya ningún líder o grupo de líderes al mando! Ya he comentado que sólo soy partidario de dar un primer paso regulando mejor el sistema financiero, y luego ir tomando pasos firmes para conseguir mejorar todo.
¿Hemos pensado que vamos a poder votar en Twitter y que nos vamos a poder autogestionar poniendo iniciativas en los blog de WordPress? ¿O pensamos que podremos compartir nuestros logros en Facebook o Tik Tok, y siempre poder elegir a los mejores candidatos en LinkedIn? Ni se imaginan lo que me apasionaba la idea cuando me vienen a la cabeza este marketing, pero me temo, que no, que eso no es posible por ahora.
Basta ya de tonterías. Porque estoy cambiando, hacen falta líderes con compromisos fuertes. ¿Cuánto tiempo estarán en Sol? ¿Se irán cuándo hayan prometido todas las propuestas, o cuándo sólo hayan hecho algunas? Personalmente, mañana me encantará dormir en Sol, pero también creo que hacen falta un conjunto de personas reales que lideren el proyecto. Personas con compromisos, porque por ahora, las jerarquías horizontales, nunca han demostrado funcionar. La política espontánea, por más que nos ilusione, no es real.
Soy uno de esos conferencistas famosos que no oculto que los políticos actuales parece que se estén riendo ahora de los jóvenes que acampan. Jóvenes que miran las revueltas de otros países de Oriente Medio y se dicen… ¡aquí también sabemos usar el Twitter o el Tik Tok! ¡Y mucho mejor! Pero mis máximas disculpas, en otros países no tienen democracias. Así que ya va siendo hora de que formemos estructuras reales que sirvan para conseguir el objetivo: generar un nuevo modelo financiero, un sistema político que debe ser honesto, y un apoyo jurídico creíble y real. Y el liderazgo es necesario, sin duda alguna.
De otra forma… esto no va a cambiar.
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