¿Se ha vuelto una estafa el coaching? ¿El coaching es una farsa? ¿De verdad que no hay nadie que controle esta maravillosa disciplina? ¿Cómo puede haber tanto oportunista suelto? Hay quienes ven en el coaching una solución mágica para todo. Otros, sin embargo, se sienten frustrados por promesas vacías y charlatanes. Pero, ¿cuánto de lo que escuchamos es verdad? ¿Y cuánto es simplemente una mala interpretación o uso incorrecto de esta disciplina?
1.- Muchos piensan que todo es posible. Bueno, que arreglen la corrupción, las guerras, el hambre, y que luego vean si se pueden aplicar el cuento. A ver si entienden que el contexto influye para el cambio, y muchas veces la gente no cambia.
2.- Algunos indican que sólo hay que cambiar de perspectiva para arreglar las cosas. Bueno, que vengan a cuidar a mis hijos, trabajan sin parar para pagar mi hipoteca todos los meses, y que luego me cuenten cómo lo ven.
3.- Muchos afirman que con el diálogo se arregla todo. Bueno, que se lo digan a las víctimas del terrorismo y de paso les mencionan que sobran las cárceles. Y como dice Risto Mejide, “si cuando hablas nadie se molesta, es como si no hubieras dicho nada”.
4.- Algunos creen que un curso de coaching gratis de fin de semana les vale para ejercer. Bueno, mientras sólo se solicite que puedan pagar el curso, sin haber requisitos de aceptación o exámenes de ingreso, me temo que se pueden ir con el cuento a otra parte.
5.- Muchos mencionan ofrecer calidad sin saber lo que es. Bueno, que les autorice cualquier club de amigos no vale para que se piensen que tienen una ISO. El atributo de calidad lo otorgan organismos independientes o los clientes, no los propios coaches.
6.- Algunos dicen que si no estoy positivo y en armonía no conseguiré nunca estar bien. Bueno, que vengan a despedir a los cientos de empleados que me ha pedido mi jefe que despida simplemente porque hay que dar más beneficios.
7.- Muchos piensan que hay que tener un sueño para ser algo en la vida ¡voy a cumplir mis sueños!. Bueno, cuando acaben de ver películas de Walt Disney que vengan a contarme por qué murió el Rey León en la película.
8.- Algunos creen que toda persona de éxito tiene un coach. Bueno, nunca a algunos no les han hecho coaching y tienen más reflexiones de éxito del que se puedan imaginar.
9.- Muchos afirman que el coaching va a ayudarme a conseguir cosas que nunca me había imaginado. Bueno, que se lo expliquen a mis consultores, que ya me ayudan a expandirme en mis negocios con análisis profesionales de lo que hace mi competencia.
10.- Algunos me vienen a vender sus paquetes de 24 sesiones para poder dar los primeros pasos en mi vida,
o incluso el cómo ser coach motivacional cinco pasos. Bueno, que hablen con mi terapeuta, al que no aguante ni seis sesiones.
La mentira del coaching
Las críticas al coaching no paran de aumentar. No nos engañemos, esta es la realidad que piensa la gente común, por más conferencistas famosos happy flower que quieran ver el mundo como les plazca. Así que más le vale plantearse a los coaches charlatanes (piratas o truchos)… ¿qué están haciendo mal? ¿Por qué existen tantos argumentos en contra del coaching? El coaching no pasa de ser jurídicamente un oficio (prefiero llamarlo disciplina o técnica) y no es una profesión reglada por el estado (sólo en algunos países como Inglaterra o Australia). Es decir, si un arquitecto te monta mal una casa, tiene todas las probabilidades de ir a la cárcel. Si un vidente, curso coach personal online, visionario, o lo que sea, te dice malamente qué hacer mañana, no hay forma de denunciarlo.
¿Qué es el coaching? En mi opinión el coaching es una disciplina que complemento con otras, y con el humo que hay en el mercado, lo menos que quiero es que me llamen coach. Soy ingeniero con una excelente maestría y demostrada experiencia en gestión empresarial, coaching, liderazgo y comunicación. La palabra coach la utilizan muchos para vender humo. ¿Verdad que cansa?
▷ ¿Qué más información debería saber sobre el coaching? 🚴🚴
Para eso nada mejor que apoyarte en la infinidad de herramientas y ejercicios que tengo recopiladas en esta página de ejercicios de coaching. Seguro te interesa trabajar con muchas de ellas:
- Dinámicas de coaching individual
- Cómo valorar a las personas, ¿cuál es la mejor forma de valorar a una persona? 👪
- Cómo se forma una creencia
- Ejemplos de juicios: ¿juicios verdaderos? ¿juicios falsos? ¿juicios negativos?
- Cómo obtener certificación en coaching
- ¿Cuál es la importancia del lenguaje en la ciencia?
- Datos sobre la felicidad
- Qué es una expectativa y ejemplos
- Qué es racionalizar las emociones
- Cómo se le dice a una persona que sabe escuchar
- Ejemplo de coaching empresarial
- Cómo superar una relación tóxica
⭐ ¿Plataforma para Gestionar la Felicidad?
Quizás no lo conocías, pero por fin vas a tener tu plataforma de Happiness Play de la felicidad con un asistente personal que te va a ayudar a ver cómo estás, saber lo que quieres en la vida, y a marcarse cambios. ¿A qué esperas para probarlo? (tienes un periodo de prueba gratuito)
Practica lo que predicas. Es lo más importante. Si yo trato con un coach primero intento ver lo que consiguió el mismo en su vida. Conozco a uno que se hipotecó de por vida en una urbanización donde nadie quiere alquilar (lejos de todo), con una cuota imposible de pagar de un sueldo modesto (porque yo lo valgo! el lema de L’oreal aplicado en la vida que no te permite comprar algo a medida de tus posibilidades), durante casi 3 años no encontraba el trabajo, rompe con cada novia que tiene. Y este tipo se atreve a dar consejos a los demás…. Sí, la ignorancia es atrevida, eso es cierto…..
Cada vez cuesta más predicar con el ejemplo. Quien me conoce, sabe que no comparto nada que no haya vivido o sienta. Muchas gracias por el comentario.
Totalmente de acuerdo con MK. Venden prosperidad que ni ellos tienen o desde la comodidad de decir: “Déjalo todo, lucha por tus sueños” y ellos no dejan su trabajo convencional. Pura estafa
Si, más que cansar daña a la visión que los demás pueden tener de otros muchos coaches que realmente ejercen como tal… ser coach, combinado con otras disciplinas, formación o lo que sea, es vocacional y no resuelve la vida de las personas ni te “da” los resultados que quieres, te AYUDA – ACOMPAÑA en tu proceso para que uses todo tu potencial, descubras las cualidades y herramientas que hay en ti, darte cuenta sobre lo que necesitas desarrollar, a conseguir por ti mismo resultados/objetivos y sobre todo, estar ahí contigo, porque realmente quieres cambiar, conseguir algo y quieres hacerlo. Es un compromiso mutuo; el éxito reside en la relación y no en el coach o el cliente. Es muy importante y recomiendo, preguntar a los testimonios y/o antiguos clientes del coach al que quieres ver para saber si es de verdad un coach vocacional enfocado en sus clientes, conocer mejor cómo les ha ayudado y qué ha ayudado a transformar/cambiar en sus vidas. ¡¡Muchas gracias por ponerlo al servicio de todos, Pedro!! Un abrazo.
Laura Molina – Coach&Mentora Profesional
Laura, muchas gracias por aportar tu comentario. Me temo que estoy contigo que el coaching es una disciplina que combina como técnica con otras profesiones Pero hay mucha confusión.
Un abrazo.
Si el coaching tiene tanto por aprender y desarrollar, qué será del Autocoaching? El coaching es un proceso de acompañamiento (nunca es una solución) que destaca por hacer que el cliente desarrolle su fuerza, su claridad, su amor. Es un proceso de apoyo al auto-coaching, es decir, de facilitar que el cliente saque lo mejor de sí mismo.
Cuanto más desarrollado esté el coach (más fuerte, más amoroso y sabio), mejor puede ser el acompañamiento.
Sergi, supongo que comparas desde el desconocimiento ya que Autocoaching es una completa Metodología con herramientas como Happiness Play o Happiness Play Pro que sólo tienen en común con el coaching la filosofía de la disciplina. Puedes comprobarlo en https://www.happinessplay.com
Un saludo y muchas gracias por el comentario.
Pedro, creo que todo lo que planteas se DEBE dar en el coach. Y que no se de, no lo define…
También hay muy malos profesionales en algunas otras disciplinas y solo algunas tienen el concepto de mala praxis.
Hay quienes son coaches y han estudiado y se han forjado como tales, y hay quien dice serlo… será que no estamos exigiendo el título para dejarlo actuar? Quizás es hora de comenzar…
Daniel, debemos exigir una regulación, porque es la única forma de que exista una mínima calidad en los servicios.
Pedro, quizás coincido en que el coaching es una técnica, pero el coach es un profesional que ejerce (o debe serlo)… de allí mi comentario.
Gracias de nuevo por compartir
Daniel,
Investigué sobre el tema, y creo que se usa la palabra profesional muy a la ligera. Se comprueba que cuando realmente se habla de profesional se entiende:
Las profesiones son ocupaciones que requieren de conocimiento especializado, formación profesional (capacitación educativa de diferente nivel -básica, media o superior- según cada caso), control sobre el contenido del trabajo, autorregulación (organización propia mediante colegios profesionales,sindicatos o gremios), espíritu de servicio a la comunidad (altruismo), y elevadas normas éticas (deontología profesional).
¿Crees que se dan todas estas características en el coaching? Como he comentado, sólo en algunos países como Inglaterra.
Un saludo y muchas gracias por el comentario.
Tienes razón Pedro, pero no solo por el coach, todas las profesiones tienen buenos y malos profesionales, incluso los arquitectos pueden hacerte algo muy mal y no ir presos (espacios inútiles, pasos incómodos, etc.), sin embargo, así como uno va probando y cambiando profesionales en función de su experiencia, así debiéramos hacer con los coaches, e incluso buscar referidos como cuando contratamos a un especialista en alguna materia.
Me ha tocado ser coachee de personajes realmente funestos, pero no por eso descalifico el coaching, si descalifico a los malos profesionales.
Creo que no es solo esta ¿profesión? la que se ha banalizado o degradado por hacer negocios.
Por mi parte dudo de los que solo son coaches, me refiero a su experiencia, quizás por mi propia historia. Yo encontré que ser coach era lo que me faltaba para completar mi formación, y es justamente eso lo que me ayuda a aconsejar, el haber estado del otro lado del mostrador, el haber tenido (y tener aún) que gerenciar áreas, dirigir personas, pelear con el día a día de la empresa. Esto me permite ponerme más fácilmente en situación.
Coincido con los que piensan que el coach solo es un complemento, que debe apoyarse en la sustancia que brinda la experiencia en las áreas empresariales.
Mi humilde opinión por cierto.
Gracias por compartir!
Daniel, muchas gracias por el comentario. Desde mi punto de vista el coaching no es una profesión, es sólo una disciplina o técnica (igual que la consultoría no es una profesión en sí). En algún país la están profesionalizando (igual que han hecho con la formación, que es llamada magisterio). Dicha esta aclaración, espero que en futuro se mejore un poco el mercado, porque lo que estamos viviendo ahora es inaceptable.
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Me ha gustado tu artículo. A muchos nos cansa la “psicología positiva” y el Sueña, visualiza y lo lograrás que nos tratan de vender.
No es cuestión de “creer” o “no creer” en el coaching, sino que te venden cuando te hablan de él.
Es como decir que no creo en la medicina porque se dedican a poner sanguijuelas y hacer sangrías.
Cuando el Coach se realiza bien (Analisis de situación + formación + entrenamiento + asesoría + acompañamiento) es una herramienta útil a la persona.
Cuando te venden mágia gurus iluminados pues eso, conseguiras tener fe como mucho
Muchas gracias por el comentario, y muy agradecido viniendo de un web de psicólogos, que sí son una profesión reglada y seria.
El coaching es una disciplina maravillosa, pero no es magia… ¡si es que es de sentido común!
Un saludo
Interesante punto de vista y en mi opinión algunos coach debieran ser coachees hasta superar sus grandes limitaciones (consejos doy que para mi no tengo).
Aunque “ellos” te dirán que no deben saber lo que haces… para sacar de ti lo mejor de ti mismo….. (pero si lo saben, mejor, no?)
La idea es que cada coach haga de cliente y tenga su propio coach. Al menos así me formaron en CTI, pero claro… luego la realidad es otra.
Alfredo muchas gracias por tu comentario.
Hola,
Creo que ni tanto ni tan calvo. Yo soy la primera persona que huyo de hablar del Coaching como una pócima milagrosa, y de hecho me irrita sobremanera.
Yo creo en el Coaching, y mucho, pero hay que tener los pies en la tierra.
Cierto es, que está muy relacionado con algunos aspectos de la psicología, es normal, la mente tiene mucho poder en nosotros, pero aprender a gestionarla, ser consciente de nosotros mismos, etc (siempre y cuando seamos personas psicológicamente sanas, por decirlo de alguna manera, por eso hablamos de clientes y no de pacientes), no tiene porqué molestar a ningún profesional de la psicología. Creo y espero, que a ningún Coach, que no sea además psicólogo y lo hiciera como psicólogo, se le ocurra trabajar con alguien que se encuentra sumido en una depresión.
Pero, por poner un ejemplo, alguien que desea avanzar o crecer profesionalmente o personalmente, desarrollar alguna habilidad, o saltar algún miedo (que no fobia), no necesita obligatoriamente un psicólogo.
Por otra parte, creo que en el mundo del Coaching, lo que hay es un mal marketing, para mi no es lo mismo hacer publicidad de unas zapatillas (diciendo que las zapatillas X te van a hacer feliz) que cuando hablaos del bienestar de las personas.
Cierto también, que hay escuelas que a través de un curso de dos días en una casa rural preciosa, dan títulos de Coach profesional. Todo esto supongo que acabará solventándose cuando el Coaching esté más o menos regulado. Por lo tanto, hay que luchar por ello, por su regulación.
Pero volviendo al artículo en sí, estoy de acuerdo con el mensaje que quiere enviar, pero creo que la forma se sale del tiesto su perspectiva no es la correcta, bajo mi humilde opinión, por todo ello, para mi, pierde el sentido. Como Coach, creo que “si quieres, puedes” claro que si. Pero siempre hablando dentro de las competencias del Coaching, que es uno mismo y lo que puedes hacer tu en ti, no en el resto del mundo. Creo que si yo quiero mejorar algo en mi, puedo. Pero evidentemente por más que quiera no puedo terminar con el hambre en el mundo. Tampoco puedo decirle a nadie que trabaje por mi y cuide a mis hijos, primero porque yo quiero trabajar y ante todo, quiero cuidar a mis hijos, no quiero que nadie me los cuide.
Evidentemente este artículo me parece la “voz de Risto” en el Coaching. Y no estoy de acuerdo con la frase de Risto: “si dices algo y no molesta es como si no hubieras dicho nada”. Si dices algo y no molestas, a lo mejor es que no pretendías molestar, y me parece el objetivo ideal no molestar a nadie, y que cualquiera que no esté de acuerdo pueda decirlo, pero alguien que habla con el objetivo único de molestar con sus comentarios, sinceramente desmerece mucho. No se trata de vivir en un mundo de “amor” en lo que todo sean alabanzas, ni mucho menos, lo mejor es recibir la opinión sincera de los demás, estén o no estén de acuerdo, sin el objetivo de molestar.
Me gustaría decir que el Coaching no es “vivir en los mundos de yuppi”, en lo que todo es maravilloso y posible sin más, como quien se toma un iboprufeno para el dolor de cabeza, pero tampoco esto.
Curioso la comparación con Risto, simplemente por poner una frase de él. Realmente creo que hablo un poquito mejor, pero bueno, tampoco conozco mucho a este hombre.
En realidad creo que pensamos igual con algunos matices distintos, ¡de lo más normal! Por ejemplo, indicas que “querer es poder” y a mi eso me parece una creencia limitante.
Sin duda, compartimos que el coaching necesita una regulación oficial, y mientras que no la tenga, a quién más debería preocupar es a las escuelas de coaching, que están empezando a competir por precio y no por calidad.
Hola, no pretendía ser una comparación negativa, de alguna manera me lo parece por la forma tan agresiva de decir las cosas, no porque no las comparta, solo por la forma.
Exactamente, coincidimos en muchas cosas, cuando tenga tiempo leo el post que me invitas a leer, de momento, yo sigo pensando que para conseguir algo, primero tengo que quererlo y luego ponerme en acción, no más.
En cuanto al tu ultimo comentario, no estoy de acuerdo, creo que a quien nos debe preocupar es a los que guardamos relación con el coaching, no a las escuelas, nosotros y los coachees, somos los más perjudicado, unos porque acabaremos cogiendo mala fama, y otros porque gastan su dinero, esfuerzo y deseos para nada.
Un saludo.
Mónica, no entiendo qué problema le encuentras a la forma… ¡se dicen cosas peores del coaching!, así que sólo he cuidado en recopilar y rebajar los insultos.Siento que no compartas la forma, entiendo que cuesta aceptar la realidad..
Por mi parte sigo apoyando el coaching como disciplina o técnica, soy un apasionado. Los perjudicados somos todos, y sobre todo, los clientes, que mal atendidos se pueden encontrar en situaciones muy graves.
Un saludo
David, comparto contigo en que coaching y terapia conllevan de partida una filosofía diferente. Pero, en la práctica y en el hacer, las herramientas que utiliza el coaching se vienen utilizando en terapia conductual. Los problemas vienen cuando se mercadea en exceso, cuando se prometen mundos felices sin esfuerzo, cuando el supuesto profesional sólo ve clientes y se le cuelan pacientes, etc. Un buen profesional vale más que mil herramientas y cuando vemos que se utiliza una herramienta para todos los casos, debemos empezar a sospechar de la capacidad, del enfoque y de la perspectiva. El cliente no tiene la culpa, muchas veces es el ‘pardillo’ y le engañan. Saludos
José Luis, muchas gracias por el comentario, con el que estoy absolutamente de acuerdo. El problema es que la ignorancia el cliente en los sectores realmente profesionales, la corrigen las instituciones públicas. En el caso del coaching, al menos en muchos países, las organizaciones que se han creado para paliar las malas prácticas… ¡son las primeras que las realizan!
Como muestra este ejemplo del propio presidente de una: https://www.pedroamador.com/gerardo-silbert … ¡no saben ni lo básico!
Saludos
Muy cierto Pedro, yo también lo vengo diciendo a mi gente, el Coaching y la PNL son herramientas que complementan una formación oficial (psicológico, pedagogo, doctor,..) y una amplia experiencia que tenga que apoye tu acción profesional. Mucho humo, mucha gente que ha hecho un cursito, yo si por ejemplo, soy pedagogo y he aprendido Coaching y PNL, lo que no puedo hacer, es tratar de trabajar para paliar fobias y problemas psicológicos profundos, como una depresión, por ejemplo, pero lo que si puedo hacer es actuar desde mi perfil profesional en temas de educación, motivación, inteligencia, etc, con el PNL y Coaching como herramienta, pero no como si fuera un sustitutivo profesional.
Por desgracia, muchas empresas y personas están cansadas, pero no me extraña, para prueba ir a youtube y vais a encontrar cientos de personas (muchas con vídeos amateurs) hablando de PNL y Coaching como si fuera la solución para todo y sin ninguna fundamentación científica o práctica. Por eso Pedro y no por hacerte la pelota, pero eres el único experto en coaching que me resulta sincero, realista y consciente de muchos temas reales…
Leo… ¡muchas gracias por el piropo!, y me alegras que veas sinceridad en mi mensaje. El mundo del coaching tiene mucho que crecer, y es una disciplina maravillosa. Pero al ritmo que va, se la van a cargar unos piratas a la velocidad de la luz.
Muchas gracias por tu comentario y muy agradecido si compartes el blog con tus amistades.
Hombre, cualquier critica es bienvenida si nuestro objetivo es mejorar como coach, pero citar al tal Risto como ejemplo de sabiduría tampoco es que me parezca muy serio.
Ange, gracias por el comentario, pero no sabía que el mero hecho de citar a una persona le convirtiera en sabio.
Pedro, el otro día me dieron otra razón más, te le comento para tu próximo recuento. Me dijeron así, ‘el coaching es a la psicoterapia, lo que la fast food a la alta cocina’. Y, le sobraban razones, si observamos el mercadeo que se ha hecho en los últimos años en las empresas con el famoso paquete ‘evaluación 360 y 3 sesiones de coaching’, como si fueran ‘el ungüento amarillo que todo lo cura’, o las lociones crecepelos. Un abrazo
José Luis, muchas gracias por el comentario… ¡y me temo que hay muchas y muchas más razones! Pero espero se filtre un poco el mercado y las personas conozcan el auténtico valor de la disciplina del coaching. ¡un abrazo!
Perdón, no lo leí entero. Pensaba que las diez razones eran del autor. Mea culpa…
¡Qué artículo tan necio y ten demagógico!
y tus argumentos para ese juicio?
porque a mi me parece que refleja una realidad con la que lamentablemente yo tambien he topado.
adoro el coaching, pero sufre problemas. y pedro es de los pocos que se pone real a la hora de señalarlos.
Alejandro, muchas gracias por el comentario. Creo que ya se ha dado cuenta que no eran mis opiniones, sino las ideas en general que hay en la calle.. ¡y hay muchas más!
En fin… a ver si el mercado madura. ¡un saludo!
de nada hombre!
Este blog es divertido. Me recuerda a Gandhi:
“Primero te ignoran, después se ríen de ti, luego te atacan. Entonces has vencido.”
como nos dice Risto, algo debes estar haciendo muy bien, porque la cantidad de gente que se toma la molestia y te considera suficientemente relevante como para venir a criticarte de forma no-construtiva en tu propio blog… ¡es enorme!
Si todo el mundo estuviera cómodo leyendo esto, no crecimiento personal de ningun tipo.
saludos
Je je Alejandro, tampoco pretendo incomodar a nadie. Pero sí decir algunas verdades para que a la gente no le tomen el pelo El coaching no se merece tanto pirata suelto.
Saludos y muy agradecido si compartes el blog con tus amistades.