Ya son varias personas las que se han suicidado en España como muestra de la barbarie financiera que sufre el país. Tras la de ayer de Amaia Egaña parece que está existiendo una movilización que generará un cambio. Desde estas líneas les quiero desear mi más profundo pésame a sus familiares y amigos, y a la vez, una muestra de agradecimiento infinito por su ejemplo. Aunque se haya pasado por este trágico suceso, la muerte de estas personas ha llenado mis ojos de lágrimas, sintiendo un gran afecto por el ejemplo causado.

“Antes muerto que humillado”, pensé también cuando me encontraba hace pocas semanas en España. Lo relataba en “cuando el suicido es la mejor opción”.  En mi caso, me esperaba un niño en Uruguay, porque de otra forma, habría obrado como Amaia. Lo menciono sin el menor temor a ser llamado imbécil por muchas personas. No aprecio el vivir en una sociedad gestionada por el miedo, y si algún día tuviera que dar mi vida porque fuera el único camino para que mi hijo tuviera un futuro mejor, no tendría la menor duda de que sería una muerte digna. Muchos no lo compartirán, porque han sido educados en el miedo. No pretendo convencerlos, porque como comenté hace poco en una conferencia en Bilbao, no le tengo miedo a la muerte, y sólo pienso que en muchas ocasiones es un regalo para continuar creciendo en otra vida.

Ahora España entra en una nueva fase, que muchas veces se visualiza como una auténtica estupidez pero que a mí me llevó años entender. ¿Qué lleva a algunas personas a inmolarse por el convencimiento de ir al paraíso con los dioses prometidos o asegurar el futuro de sus familiares? Reflexionen, y se darán cuenta que la brutal opresión lleva a que la inmolación tome sentido. ¿Rebuscado? Usen la empatía e imagínense que hagan lo que hagan, no sirve para sacar adelante a su familia. Cuando la única solución para asegurar el bienestar de los tuyos es la muerte, entenderá mejor qué motiva la inmolación…

Muchas personas responsables de la actual crisis han generado mucho miedo. La Naturaleza es muy sabia y justa y quizás estas personas deberían empezar a cambiar las cosas que hacen o puede que empiecen a sentir en sus propias carnes lo que tanto han sembrado…

Ya son varias personas las que se han suicidado en España como muestra de la barbarie financiera que sufre el país...