¿Qué pasa CUÁNDO SIENTES QUE TU VIDA NO VALE NADA? Aquí las mejores REFLEXIONES para cuando la vida es una mierda⭐
¿De verdad piensas que hay que mandar a la mierda todo? ¿Aún no sabes por qué mi vida es una mierda? ¿Siento que mi vida es una basura? No te compliques la existencia, porque cuanto más te preocupes, más te costará aceptar la realidad. Recuerda ese dicho de que una mentira repetida mil veces se convierte en una realidad, así que deja de repetirte que eres una mierda. Quizás un día te pique un mosquito, porque eso ya sabes que es lo más normal del mundo. También te habrás tropezado infinidad de veces, porque no siempre prestas la suficiente atención. Ni que hablar que algún pesado objeto te puede haber golpeado por torpezas del Universo.
En esta vida es fácil que alguien te haya mentido, no una, sino cientos de veces. Alguien seguro que también te engañó, no una sino muchas veces. Un día incluso te pueden robar o estafar ya sea poco o mucho valor, cuando menos te lo esperes, y quizás coincide con tu peor situación financiera.
La verdad es que hay gente que no sigue las normas, y no es extraño que un día te lastimen emocionalmente, cuando más afirmabas que habías encontrado al amor de tu vida. Cuántas veces habrás escuchado un «te quiero en mi vida» que se lo lleva el viento como por arte de magia. Sí, te juraba que te quería hasta la eternidad.
Sí, sí, me dicen que soy una mierda. No sería extraño si un día te despiden porque un maldito cabrón te ha criticado a tus espaldas. ¡Qué vida de mierda! ¡Esta vida es una mierda! Has creado una idea, y resulta que te la podían robar o simplemente llevarse el mérito de tu mejor logro. Incluso te pueden haber bajado el sueldo pese a que te merecías haberlo duplicarlo.
Es la realidad, la vida no siempre es un camino de rosas. ¿Qué todavía no sabes la última hora de la guerra? ¿Te da la sensación de mientras mas bueno eres mas mierda son contigo? ¿Quién te tiene que fallar para que lo aceptes? ¿Tus familiares? ¿Tus amigos? ¿Tu pareja? ¿Tus hijos? ¿Tu vecino? ¿El amigo íntimo del vecino del amigo de tu amigo de la infancia? ¿Tu jefe incompetente? ¿Tus compañeros? ¿El Gobierno? ¿Tu marca favorita de helados? ¿El angelito de la guardia? ¿O todos a la vez? ¿seguro que la vida es una mierda o tú la ves así? Cuando sientes que tu vida no vale nada, es una porquería, ¿qué hacer si tu vida es una basura?
A mí me ha pasado de todo, y seguro que no es ni el uno por ciento de lo que me puede llegar a pasar. La realidad es que la vida es como una carrera olímpica de obstáculos en la que hay que saltar algunas vallas. Con un poco de entrenamiento solemos tener el éxito de la vida y saltar con eficacia. Pero alguna vez nos podemos comer la valla y caer al suelo con auténtica torpeza. Mientras, mirar como los demás nos pueden adelantar.
Esta vida es una porquería. No te llames a engaño, ya que te puedes volver a levantar y acabar la carrera. NO ES UN DESASTRE CAERSE, recuerda que errar es de sabios, por más estricta que haya sido tu educación. Deja de preocuparte por la caída, seguramente no será la última vez, y simplemente ocúpate de acabar la carrera (los buenos tiempos siempre vuelven no te preocupes). Tu carrera. Sólo así conseguirás la mayor satisfacción: lo importante es participar.
Incluso hay personas que piensan solo espero que mi muerte tenga más sentido que mi vida. Lo importante, si te caes... ¡tienes que aprender algo!, porque de otra forma sí que querrás mandar a la mierda todo. Sí, ¡a la mierda todo!
Alabanza propia, mierda segura (refranero)
- ¿Estás bien? – De las habituales preguntas incómodas para amigos que rompen el hielo para sacarme de mi vida de mierda.
- No, la verdad es que no. Nada bien. Además, ahora no tengo trabajo. Bueno, desde hace tres años. Así que tus ideas de felicidad son muy interesantes pero no me sirven parada. Sólo quiero que todo sea como antes porque veo que mi vida es una basura.
- ¿Qué consejos? – le indiqué con rapidez.
- Todos los que escribís estáis siempre con la misma historia de que hay que ponerse optimista y todo eso… ¡y ya!, que con eso se soluciona todo. Luego la gente ¡no sigue las reglas! A la mierda todo.
- ¿De verdad se cree superior a los demás?
- ¿Ves? Ya estás con el cuento chino en el que se evita dar soluciones a los problemas. Quiero volver a mi vida de antes, de verdad que quiero que todo sea como antes.
- Bueno, no te quería importunar, pero ¡yo no tengo ni idea de cómo se solucionan tus problemas!, y a lo sumo te puedo acompañar para que tengas otro punto de vista de la situación.
Se hizo un incómodo silencio en el ambiente. Sonaba alguna canción, que para más curiosidad, era de un grupo local llamado “No te va a gustar”. Parecía que la realidad tampoco gustaba, ¿cómo decir algo bonito?
- Soy enfermero, llevo cuatro operaciones en el pie. Tengo la pierna mal de por vida, por un maldito error médico- me comentaba con desánimo.
- Uff-, sin saber muy bien qué decir.
- Un dolor continuo, en el tendón de Aquiles.
- Uff-, sin saber a priori cómo responder a ese sufrimiento.
- ¿Sabes lo peor? Es mi ánimo. Nada va a hacer que yo sea la de antes. Eso es imposible. El maldito dolor no me hace feliz, por mucha actitud positiva que le ponga al asunto. Yo antes no era así, yo antes sabía qué es valorar. Se me han quitado hasta las ganas de ser enfermero, cosa que antes era lo primero en mi vida. A veces pienso que esto no me ha podido pasar a mí.
- ¿Y calmantes?
- Si medicado hasta no poder más. Mi vida es una mierda, o soy una porquería de persona, como prefieras llamarlo.
- Bueno, yo también estoy medicado de por vida, si eso sirve de consuelo – indicaba para marcar algo de empatía.
- Pero ya nunca será lo mismo- volvía a insistir- es como si ya no pudiera ser feliz con poco. Perdona si te estoy molestando con tanta repetición.
- Te entiendo, yo viví así un tiempo. Pero un día acepté que era otro y dejé de luchar por volver a ser lo que era. Acepté que era distinto y comencé a crear un nuevo Pedro.
- Gracias. Ojalá que al menos recupere la ilusión por las cosas porque sinceramente no tengo ganas disfrutar de vivir.
- Te entiendo, matarte no tiene coste alguno, pero dejas muchos problemas que no son gratis a personas que te quieren. Es más fácil pensar eso de "quiero que todo sea como antes".
- Sí, eso es verdad, aunque no sé si es suficiente para entender que las personas pueden cambiar. Es como si todo me diera igual. Sólo me apetece estar en la cama y dejar pasar el tiempo. ¡Mi vida es una mierda!
- El tiempo no puede pasar en balde. Respeta y determina tus valores (con algún ejercicio sobre valores) y ponte sueños o un propósito de vida. Vive de forma distinta… ¡pero vive!
- Gracia, de veras. Ya lo he vivido. Está muy bien. Pero lo de la suerte no lo entiendo. En mi caso, ahora por ejemplo soy enfermero. Me he esforzado mucho por serlo. Mucho, y ahora compruebo que no tengo trabajo. Y creo que la suerte sí existe, porque por culpa de un accidente ahora no encuentro trabajo, y la gente que acaba de terminar la carrera sí tiene. ¿Cómo se explica eso?
- Es una de las reflexiones de la vida que me llevó a incluir el contexto en nuestro análisis, como así mencioné en la charla de motivación de Bilbao. Nos guste o no el contexto está como pegado a nuestro cuerpo, algunas veces favorable, y otras veces totalmente en contra. Es como el viento que mima un barco, y de poco depende saber de qué lugar eres.
- Seguramente, será el destino.
- No sé lo que será, pero sí sé que ahora eres otra persona.
- Es un poco difícil de entender, parece un ejemplo de ignorancia.
- Es difícil de aceptarlo en vida, no de entender- repliqué sin dudarlo.
- Para mí las dos cosas. No entiendo aún por qué me ha pasado a mí. Sin más. O, mejor dicho, qué hecho yo para merecer esto.
- Porque lo elegiste antes de venir a este mundo. Lo tenías que aprender, aunque sea con el chat gpt para dummies.
- ¿Elegí el qué? ¿Tener un accidente? ¿Tú estás bien?
- Algo así- comenté sin dudarlo, sin intención de presumir.
- Eso no se elige, es como tener cáncer. Eso te toca. A veces siento que mi vida es una porquería. Y desde el coronavirus, todo es mucho más mierda.
- No pretendo convencerte, no gastaría el tiempo en algo tan personal. Personalmente creo en otras vidas, como comentaba en la conferencia de motivación de Bilbao. Luego encontré en La vida de Pi que usa la misma explicación… ¡cada uno es libre de creerse la historia que quiera! Mi filosofía me ayuda a vivir, porque de otra forma, estoy totalmente contigo… ¡sería toda una mierda!
- ¿Vuelves por España?
- ¿Por? Preguntaba rápidamente.
- Porque me gustaría conocerte y que me contaras eso a los ojos.
- Bueno, por mejor o peor que te mire a los ojos, va a seguir siendo mi filosofía, y eso no cambiará. Piénsalo, porque por ahora no sé cuándo iré por España, ahora vivo en otro sitio.
- Muchas gracias por tu reflexión… ¡y espero que te vaya todo bien!
- Lo mismo digo, fuerte abrazo.
¡Vaya año de mierda! En este momento de la vida, y en cualquiera que se precie, tienes que recordar que existen sólo dos preocupaciones para tener en cuenta: la primera es que todo tiene solución menos la muerte; la segunda es no inquietarse demasiado porque vayas a morir, porque tarde o temprano, y quizás cuando menos te lo esperes, ocurrirá.
Para todo lo demás, no olvides nunca el kit básico para disfrutar la vida: una sonrisa, una caricia a quien te acompaña, un silencio respetuoso cuando tienes que apoyar a alguien, un pensamiento positivo, un abrazo a los amigos, un beso a la pareja, el mejor mimo a los hijos y familiares, un salto de alegría, y todo lo que se te ocurra y que quizás hace mucho que no expresas. Es importante que practiques el desapego emocional, tus emociones no deben quedar retenidas, pese a que en muchas sociedades se empeñen en apagarlas.
Del resto no hace falta preocuparte, sólo ocuparte con esmero. Quizás es el momento para ver quién te va a poder prestar dinero, quizás es el momento para buscar abogados especialistas en concurso de acreedores que son saben de crisis de empresa, quizás es el momento para que evalúes cambiar de contexto de forma radical.
Anticiparse al futuro, y pensar que todo va a salir mal, sólo te hará sufrir sin sentido. Pero, ¿qué hacer cuando tu vida es una mierda? Bueno, seguro que mi blog te puede dar muchas nuevas ideas.
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Tú recuerda lo que yo dije una vez:tu eres mi paraíso en este infierno
La vida es una completa mierda, todos sufren pero quién tanto como yo, quién tanto como yo que tengo que soportar una voz en mi cabeza que jamás se apaga y no se puede disminuir su volumen, quién tanto como yo sabe que es fracasar y fracasar como si de una necesidad humana se tratara, por ms que luches por no cagar tienes que cagar así pareciera mi vida por más que escuche lo mismos consejos de mierda y los aplique mi vida es igual, y o único que me conecta a ella es el temor a morir, que sentido tiene todo y los pensamientos que fluctuaron por años a la nada. Solo quiero descanso
Que passarà el dia que ya no este aquí??? No quiero hacer daño a l'ós que me quieren però yo sobro aquí
YO LLORO SOLO DE NOCHE ASOLAS PERO ULTIMAMENTE NO TENGO NI LAGRIMAS ESTOY ACABADO
Algún día llegará ese día dormir para siempre
Que dia de mierda, se me parte el alma, ganas de llorar tengo muchas, pero no quiero que me vean llorar.
Y aparte de la mierda literal de los coprófagos también hay quienes disfrutan de las mierdas metáforicas de la vida, como un cierto grado de masoquismo y/o de sadomasoquismo. Lo de tomar por culo es sencillamente una opción sexual más.
Bueno, hay gente a la que le gusta la mierda, los coprófagos. Y a tomar por culo, y no quiero comparar, también hay a quién le gusta.
Nunca escuché la solución a "la vida es una mierda " pero me queda claro que como la vida es mierda hay que también volver mierda a los demás
harto de todo esto
Sí, la vida es una mierda. Al final todos vamos a morir. Has que tu vida valga la pena. No te masturbes todos los días con pensamientos de la que te gusta. Lucha por quien sea ella la que te masturbe.
(Soy un adolescente que luchará por que todo sea increíble)
Interesante reflexión 🙄
Qué texto banal para salir en las búsquedas de Google de gente desesperada. Como dice el tango, la vida es una herida absurda, dan ganas de balearse en un rincón.