Un momento para pensar qué es lo que mejor te deparó el pasado año.
Es un ejercicio que os recomiendo realizar y que consiste en parar un momento para pensar qué es lo que mejor te dejó el pasado año. Intenta argumentar por qué, sintiendo qué parte conectó tus valores, y qué parte fue pura casualidad. Si quieres explorar tus valores te recomiendo usar este artículo Ejercicios para explorar tus valores, y ya te indico que los míos son vida (el principal), justicia, humor, respeto y equilibrio.
El haber sido padre está siendo una de las experiencias más enriquecedoras de mi vida. Personalmente siento que vale mucho más que años de Universidad o de MBA, pero también reconozco que me estoy permitiendo disfrutarlo como pocos padres hacen. He decidido bajar mi rendimiento laboral para aumentar el tiempo que paso con Nicolás, y curiosamente esto me está haciendo meditar más y mejorar mi rendimiento laboral.
En cualquier caso, de los cientos de momentos que he tenido con Nico, recuerdo perfectamente que a los pocos meses tuvimos que vacunarlo. Lo paseaba por la calle en su carrito todo contento y le indicaba las ventajas de estar vacunado. Me miraba con cara de felicidad por el mero hecho de hablarle, pero no tenía ni el más mínimo síntoma de estar entendiendo lo que decía.
Al llegar la enfermera me indicó que serían unos pinchazos bien rápidos y que le agarra con fuerza para evitar cualquier susto. Personalmente le seguía sonriendo y Nico me miraba con dulzura. Hasta que le dieron el primer pinchazo y comprobé que se le salían los ojos como expresando… “¡Papá me has engañado! ¡Qué dolor!”. En ese momento casi hecho a llorar y le di un tremendo abrazo para intentar apaciguarle. Siguió llorando unos minutos, mientras le abrazaba y entendía que el amor padre/hijo es algo que hay que vivir y que no creo que existan palabras para explicarlo.
Sin duda el valor vida quedó patente más que nunca.
Como comenté en Cómo educar en felicidad (y además en la Universidad) he comenzado una asignatura completa en La Universidad Católica del Uruguay: “Cómo conseguir la felicidad con Autocoaching”, donde además de unas pinceladas teóricas de lo qué es la felicidad y qué se dice por el mundo, usamos métodos prácticos para que cada alumno entienda cómo buscar su felicidad.
El momento más curioso fue cuando una alumna se acercó a mitad del curso a decirme: “profesor tengo que agradecerle que antes entraba en mi casa y no paraba de quejarme, y desde que compruebo que soy responsable de mi felicidad, ¡ahora converso con mis padres y busco cosas que me lleven a ser más feliz!”. Quien ha estudiado y vivido la filosofía de la disciplina del coaching sabe muy bien que cada persona somos responsables de nuestra vida, y que la queja sin sentido sólo sirve para alejarnos de nuestros sueños. Es la filosofía de vida que muestro.
Aquí no estoy seguro de qué valor pudo jugar o si eran todos a la vez. Pero en cualquier caso, el logro por el trabajo siempre deja una buena sonrisa.
Este año me invitaron a la XXIII Convención de Gestión Humana en Guatemala, donde tuve oportunidad de conversar sobre el Talento. Ya en el video que preparé para el evento me lo pasé en grande, porque me río de mí mismo como nunca.
Pero en esta conferencia realicé una cuestión poco recomendable habitualmente, y que consistió en hablar sólo de mi mismo. Expuse mi vida como todo un aprendizaje donde destaqué todos los puntos que me habían hecho reflexionar sobre el talento. El resultado es que sólo disgustó al 10%... y el resto quedó más que contengo. Francamente una conferencia estupenda con la que obtuve un montón de felicitaciones.
Al compartir toda mi experiencia quedó latente el valor vida, que además fue transmitido con el valor humor para que llegara con mayor impacto.
Reconozco que en el 2012 me angustié un poco tras la decepción que sufrí en mi relación con la organización de coaches de ICF. Entiendo que no cumplieron mis expectativas y como quedó patente en Los 10 peores coaches que encontré en el coaching (y los buenos), se les vio de qué pie cojeaban. Hablan de ética cuando realmente son abanderados del dinero puro y duro. Y es una pena que una disciplina como el coaching tenga a esta organización liderada por personas que están realmente engañando. Personalmente dejé las cosas bien claras, y algunas personas me han criticado y atacado llamándome de todo. Curiosamente sin argumentos, y sólo por tener el valor de decir la cosas (personas a las que las encaja aquello de la tontería del todo vale). Pero también he recibido muchísimas felicitaciones de mi coherencia y muchas que han decidido no afiliarse a la organización de ICF porque la veían una pura tontería.
Lo que digo siempre, el coaching es una disciplina maravillosa, de la que me gusta hablar y compartir cientos de experiencias. Afortunadamente hay asociaciones que sí están haciendo una labor estupenda, y acercando el coaching a nuestra sociedad. Incluso diría que muchas personas de la propia ICF, aunque esperemos que cambien pronto el liderazgo actual que está siendo un engaño como pocos (como se comprueba en Las lecciones que tiene que aprender el coaching de Arthur Andersen).
El valor justicia quedó reflejado aquí, y no es que me acumule algún tipo de rencor, como les gusta afirmar a algunos coaches impulsivo, es que simplemente me creo una persona congruente con lo que pienso, digo y hago.
El haber tenido más tiempo para Nico ha implicado pasar más tiempo en casa. Mientras daba algún biberón o simplemente guardaba sus siestas he podido trabajar más en actividades del blog, escribiendo, aprendido a mejorar el posicionamiento, el SEO, … ¡y habiendo desarrollado una estrategia propia para la gestión de contenidos digitales! Para aprender y hablar de Community Managment muchas personas se van a cualquier curso y se creen los amos del universo (restable según qué casos). Pero personalmente he tenido la oportunidad de probar mil estrategias y en tiempo real monitorizar el impacto de las mismas. Hoy en día puedo recomendar a mis clientes las cosas aprendidas, y como no podía ser de mejor forma, hablo desde la experiencia.
El pasado año he roto algunos récords de visitas, y esos días, siempre los disfrutaba con una rica pizza del local de enfrente. Fueron las más de 120.000 páginas vistas por mes o las más de 10.000 páginas vistas en un día… ¡unas metas excelentes! Y este año… ¡a seguir creciendo! Muchas gracias a todos los que me leéis, y siempre muy agradecido si compartís el blog y canal de Youtube.
Aquí continuamente he gestionado el valor equilibrio, haciendo un balance entre el tiempo que me consume el blog, que es una pasión, y el tiempo que dedico a mi vida familiar y profesional.
Realmente este año aprendí a editar video de forma profesional. Puedes aprender en una academia pero siempre soy de la preferencia de aprender por mí mismo con algunos tutoriales y luego poder ser mentorizado por expertos que te haga crecer. En este caso empecé por personas de Studio 9, y luego rematé mucho aprendizaje con Mauricio Pérez de AtlantikaTV, con quien colaboro en algunos proyectos.
Aquí está un ejemplo del nivel de calidad al que llegué este año, y en donde aprendí muchas técnicas que tenía separadas de otras disciplinas. Y queda mucho por aprender…
Esto ha sido toda una experiencia, ¡en todos los sentidos! He ido compartiendo todos los programas, y se pueden comprar en el enlace de Ruta Feliz. Aprendí la experiencia de cómo un productor tiene que buscar y gestionar contenidos, de cómo un cámara tiene que grabar los mejores momentos, de cómo un técnico de sonido debe cuidar de los molestos ruidos, de cómo actuar ante la cámara, de cómo un editor debe juntar toda la materia prima, de cómo un comercial debe presentar el producto a los distintos auspiciantes, … ¡han sido tantas cosas!, siempre de la mano de Leticia Brando y de otras personas que no nombro porque todavía se andan ganando el piso en Uruguay (je je).
Pero os comparto que como proyecto tuvo su gracia y me ayudó a crecer, pero personalmente volveré en otro momento a la TV por diferencias en la financiación del programa…
Aquí más que valores, se habla de valores... je je.
Uruguay es un país bien pequeño, y donde parece que se conoce todo el mundo. Como he comentado en alguna ocasión aquí existe un programa, Tiranos Temblad, que suben cada semana a YouTube y que muestra los mejores momentos ocurridos. Ha sido un placer saber que uno de mis videoblogs pasó a Tiranos Temblad 21 (este sin saber ni lo que era) y que volví a repetir en el Tiranos Temblad 41… ¡Al final resulta que Uruguay es el mejor país!
Bueno, actualicé mi carta a los reyes magos en el amor, y reconozco que es de los textos que más aprecian los lectores. A partir de ese texto he recibido otras cartas a los reyes magos, que he ido publicando en mi blog. Un momento curioso del año pasado fue cuando una mujer se declaró tras leer mi entrada de blog… ¡cómo cambian las cosas! ¿Ya has preparado tu carta a los reyes magos?
No me suelo alegrar por cosas así, pero en ese momento quedó claro que en España había algunos “chorizos” que ya llevaban demasiado tiempo riéndose en la cara de los ciudadanos. Me divertí mucho escribiendo Las 10 cosas que he aprendido gracias a Bárcenas. Creo y espero, que no sea el único, y que sólo sea el comienzo de una larga lista. Muy larga… ¡aún no quiero perder la esperanza por España!
De nuevo el valor justicia quedó más que satisfecho.
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