¿Quieres saber cómo encontrar a la mujer de tu vida? No estoy del todo seguro, pero quizás te sirva saber cómo conocí a la mujer de mi vida.
¿Quieres saber cómo encontrar a la mujer de tu vida? No estoy del todo seguro, pero quizás te sirva saber cómo conocí a la mujer de mi vida. Han sido años de sabiduría los que me han llevado hasta ella. En mi vida han sido años de probar y probar con muchas mujeres (dejo el “muchas” para tu propia valoración). Han sido años de escuchar recetas mágicas y de caer en errores de otras personas. Así que me voy a tumbar cómodamente, y responderé a la pregunta ¿cómo conseguí a la mujer de mi vida? Pondré algo de música y voy a compartir las tres reglas que me han funcionado a mí después de años y años estudiando el tema del amor.
Te lo dejaré bien claro, soy un obsesivo compulsivo, y en el tema del amor no iba a ser menos. He estudiado durante años el comportamiento de las personas, te podrías sorprender de todo lo que averiguo de un simple vistazo. He escuchado a cientos de personas, muchas veces en sesiones de coaching de pareja, donde he comprobado patrones que tenemos todos impresos en el ADN y que sólo nos llevan a auto engañarnos sin remedio. Incluso me he ofrecido públicamente para ser la pareja perfecta.
Es sencillo, en el titular había tres palabras, así que permíteme explicarte cómo funciona la cabeza que llevamos puesta.
La primera palabra es mujer. En tu caso puede ser un hombre. Incluso si te has aburrido puede que ya ni busques pareja, y te conformes con una mascota. No me importa, pero la primera pregunta es sencilla. ¿qué es para ti una mujer/hombre/compañía? No quiero estupideces como alguien que me acompañe y me quiera. Eso es como que te pregunten en un restaurante, con una carta maravillosa de platos, qué quieres comer, y tu respuesta sea: “simplemente quiero comer”.
Espera, que no has leído bien. Vuelve a leer e imagínatelo. Vete a un restaurante donde no te conozcan de nada, uno que te parezca que te pueda gustar. Entra, pon cara de hambre, y cuando te vengan a atender y te digan “¿qué quiere usted comer?”, simplemente responde… “¡quiero comer algo que me guste y que me sacie el apetito!”. Imagínatelo bien, porque cuando lo hayas hecho, y te des cuenta de la tontería que te hago pensar, te diré que me encuentro a muchísima gente que me responde algo similar para referirse al amor.
Primer secreto. ¿Sabes cómo te gustaría que fuera tu pareja? Escribí mi carta a los reyes magos, y también he recopilado muchas aquí (no te las pierdas). Claro escribir es fácil, y supongo que mi pareja no cumple el 100%. Pero cumple lo más importante y eso es prioritario. Te lo repetiré claramente, “cumple lo más importante”, que no son pocas cosas, créeme.
La segunda palabra si te parece será “vida”. ¿Estás buscando a la mujer de tu vida? ¿Pero cuando dices tu vida quieres decir la que te acompañe el resto de tu vida? ¿Quieres decir la que según la media de esperanza de vida te tiene que acompañar muchos muchos muchos años? ¿O solo quieres decir la que te acompañe hasta que te dé por cambiar de estilo de vida? ¿De verdad alguien piensa que no cambiamos en tanto tiempo?
Ya, ya, ya, ahora me vas a contar que tus abuelos, con los que te criaste, han durado toda la vida. Claro, tus abuelos que usaran Tinder en la juventud, que tenían vuelos low-cost para irse a Ibiza a veranear, que tenían vicios al alcance de la mano, y los mismos que chateaban por WhatsApp en veinte grupos distintos. Los mismos, sí, sí, sí, los conozco.
Gracias por compararme en el amor con tus abuelos. Porque en el resto dices que viven en otra órbita. Justo. El amor para toda la vida ¿existe? ¿o son como las armas de destrucción masiva que se decía que había pero que nunca existían?
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Segundo secreto. El amor para toda la vida no existe. Lo que existe es el amor que das hoy. Si no das amor hoy, olvídate de mañana, de la próxima semana, del próximo mes, año, o lo que gustes del futuro. Deja de preocuparte tanto por el futuro, y haz que hoy sea el mejor día que le das a tu pareja. Si tu pareja se larga, es que no te merece. Deja de vivir con miedo.
La mujer de tu vida
A mi pareja la encontré en las redes sociales (Tinder), que me parece un sitio tan mágico como otro cualquiera. Cuando vi a mi pareja no me cegué, ni sentí cosquillas en el cuerpo (quizás ya por la edad). Y lo mejor de todo fue que cuando conocí a mi pareja le dije de primeras que no quería nada estable, y que era mejor que viéramos a otras personas.
¡Todos los cuentos de Walt Disney a la basura! Pero hay una cosa en la que no fallé. Nunca me llamé a engaño, siempre fui directo. Por eso, cuando fue el momento, me di cuenta de que estaba preparado y no arrastraba nada tóxico en la mochila.
Tercer secreto… si quieres algo para toda la vida, no empieces mintiendo desde el primer día. Si buscas algo casual dilo, quizás se convierta en algo estable. Si buscas algo estable dilo, quizás no te marques unas expectativas falsas con quien no debes.
Sencillo, ¿verdad? Pues no. Le des las vueltas que le des es sumamente complicado. Es infinitamente complicado, porque nuestra cabeza es nuestro peor enemigo. La están programando para desesperadamente buscar algo mejor. Continuamente te mandan mensajes subliminales por todos los lados. El cuerpo perfecto, la persona perfecta, el triunfador… ¡busca! ¡busca! ¡busca! ¡Busca la mujer de mi vida!
A ver cómo te lo reprogramas en la cabeza: “las personas perfectas no existen”. Las parejas perfectas sí, y se trabajan día a día, con sus momentos buenos y sus momentos malos. ¿A qué esperas?
Empieza leyendo esto un par de veces, compartiéndolo con tus amigos, y reflexionando cada cierto tiempo. Lo puedes conseguir. ¿Te animas a conseguir también la mujer de tu vida?
En este video te comparto cómo hacer una carta de amor pidiendo a los Reyes Magos...
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