Comienzo un bonito y soleado en Barcelona. Estoy en el maravilloso Paseo de Gracia, donde tuve oportunidad de trabajar dos años, y a donde vengo muchas veces a colaborar con un antiguo cliente, Infor. La gente parece feliz, porque a cada mirada descubren algo nuevo. Puede ser aquí, en el Obelisco de Buenos Aires, o en el Barrio Rosa de México DF, por poner algunos ejemplos. Sitios dispares que merecen ser disfrutados, siempre desde ángulos distintos... Si quiero predicar con el ejemplo, me pregunto ¿qué es predicar con el ejemplo?

Puedo trabajar desde mi portátil, y comprobar los últimos emails que han entrado con el 3G, cosa impensable hace 10 años (al menos que tirara un cable de 50 metros por la ventana). De repente recibo una respuesta de ICF coaching a mi correo de hace unos días (en donde ponía encima de la mesa los abusos de una escuela de coaching) y en donde resume:

Me parece injusto lo que te ha pasado y apoyo tu interés por aclarar con ICF las irregularidades que tuvo Luis Carchak que, por lo que extraigo de lo que mandaste y los enlaces que incluyes, es principalmente que: “La mayoría de sus miembros titulares son de una única escuela de coaching que es de la mujer del presidente de ICF España y que, además, las actividades de ICF España son, en la mayoría de los casos, dan excesiva publicidad a dicha empresa. “

Es decir, comparte la injusticia, pero en vez de ofrecer su ayuda, menciona:

“CUANDO VES QUE ALGUIEN ESTÁ HACIENDO ALGO MAL - NOTIFICA A LAS AUTORIDADES JUDICIALES PERTINENTES SIN MÁS ¿existe la justicia?.  Ni confrontaciones directas al verdugo, ni buscando poner unos y otros de tu parte, etc.  Claridad, honestidad y directamente a los responsables que pueden hacer algo al respeto.”, y acaba diciendo, “Mucha suerte y, por favor, no dejes que tus clientes hagan lo mismo que estás haciendo ahora por la rabia e impotencia que sientes.  No es la solución y no es muy ético. ”

Predica con el ejemplo reflexiones

Entonces pienso, ¿Qué es lo que comparte? ¿Ha leído realmente mi e-mail? ¿Se menciona cómplice pero se lava las manos? Además me dice que mucha suerte, con una carrera de coaching gratis, y que no la tome con mis clientes. Curiosa idea que también han mencionado otras personas que no han leído en detalle la denuncia. Os comparto que lo primero que me enseñaron en la escuela de coaching donde estudié (CTI) es la gestión personal (autogestión). Cuando se realiza coaching, uno está sólo para el cliente, y los problemas personales se dejan a un lado. Si un día me siento que la emoción es muy intensa, pospongo la sesión (sólo lo he hecho una vez en ocho años, cuando perdí un familiar). Y este tipo de cosas son muy importante para evitar escuchar cosas de axon training denuncias.

Aquí retomo la idea del Paseo de Gracia, que sigo contemplando. Todo el mundo mira maravillado lo que tiene a su alrededor, y poca gente se preocupa si España está siendo uno de los países con mayor crecimiento en corrupción política. Poco preocupa si han existido comisiones escandalosas para cualquier construcción que les rodea, y que han ido a pagar a los amigos de los amigos de alguien que se pasea por aquí con una sonrisa. Me temo que cuando alguien lo denuncia, le dicen… “mucha suerte, pero yo voy a seguir votando a estos políticos”.

De las preguntas que empiecen con qué, ¿seguro que esto es para todos? La responsabilidad es global, de todos. Pondré otro ejemplo muy cercano para aclarar la idea. Mucha gente se llena la boca con sabios consejos del estilo “no compres esas deportivas porque esa marca explota a los niños de la India” o “para hacer esa ropa tienen a completas familias mal pagadas en China”. Después, van a la tienda de la esquina, esas que abren 12 horas al día (aquí en España son los “chinos”, en otros países cambian el nombre según la población que lleve mayoritariamente el negocio), y compran incluso al niño de siete años que le tienen obligado a vivir en la tienda con los padres. ¿Perdón? Quizás hace falta un poco más de andragogía. ¿A ese niño no te importa explotarlo y sí a los de la India o China? Un ejemplo de juicio más, ¡La incongruencia al poder!

Seamos serios, para hablar de la ética, o de la Responsabilidad Social Corporativa (la RSC que tanto me gustó estudiar en Esade), primero hay que practicarla. Para merecerse vivir en un mundo mejor, los primeros que tenemos que dar ejemplo somos nosotros.